¿Realmente nuestros niños son importantes?
- Vicen García
- 14 jun 2020
- 3 Min. de lectura
Estos días de cambio de fases a muchas familias y docentes nos ha surgido esta terrible duda.
Como maestro y padre de dos niños que cada uno cursa diferentes etapas educativas, infantil y primaria para ser más exactos; me está dando qué pensar durante estos meses de cambio de fases para con nuestros políticos y expertos. Y la gran duda que me surge es… Realmente con todas estas tomas de decisiones. ¿Se está pensando demasiado en nuestros pequeños o en realidad no sé está pensando nada en ellos?. ¿Se está intentando sobreprotegerlos o están abandonados a su suerte?
Con la toma de decisiones y medidas como; apertura de bares, discotecas, contacto y encuentro social… principalmente para potenciar y hacer resurgir la economía y comenzar a adaptarnos a la "nueva realidad". Estamos demostrando ser egoístas y desconsiderados. Ver terrazas repletas de gente, colas en el mercado o alguna tienda en donde la distancia de seguridad en la espera de la cola es nula y sin embargo, ver todavía parques vacíos de niños, ofertas y alternativas al entretenimiento infantil en la calle, al aire libre inexistente… Me hace pensar que nada ha cambiado, seguimos y seguiremos siendo una sociedad de segunda división en donde pueden más otros intereses a los humanos.
Hoy en día pesa más resurgir la economía que reforzar y fortalecer nuestro inminente futuro, los que realmente nos pueden llegar a salvar de todos nuestros desastres generados. Debemos pensar en nuestro niños, nuestros jóvenes y adolescentes que, en lugar de darles alternativas tanto educativas como de ocio y tiempo libre, los apartamos y dejamos de lado.
Y hay quien nos puede decir: "Noooo, hay que tener cautela, hacer bien las cosas y pensar mucho en ellos para que no se amontonen en los parques, para que las actividades que se propongan sean lo más seguras posible…." La misma cautela que estamos teniendo los adultos en terrazas, bares, discotecas y tiendas.
O nosotros como adultos "responsables" maduramos y damos ejemplo de civismo y cordura o nuestra generación venidera, nuestros pequeños, estarán tomando nota de nuestra irresponsabilidad y… seguirán siendo ellos los que paguen la mala gestión que se está realizando por parte de sus mayores.
Hace no mucho leí el artículo "Quién piensa en los niños, en las niñas" del periódico "Público" escrito por Cristina Fallarás y nos dice:
"Últimamente me acuerdo demasiado a menudo del título de la estremecedora novela de Simona Vinci: De los niños nada se sabe. Y pienso que los menores de nuestra sociedad están recibiendo una lección acelerada de soledad, miedo y diferencias de clase…
...La cuestión es por qué la única preocupación de las autoridades que tiene que ver con ellos consiste en trufarlos de tareas que engordan su soledad y su frustración. Por qué, al contrario que en el resto de ámbitos de la economía y la sociedad, nadie se ha parado a pensar en soluciones imaginativas y efectivas para que esto no sea así. Aunque fracasaran una y otra vez, merecería la pena haberlo hecho."
Por favor, seamos ejemplo de civismo y solidaridad para con nuestros niños y niñas. Pensemos en ellos, en sus derechos, en sus libertades y dejemos de pensar en el bolsillo.
Seamos un buen ejemplo de solidaridad y respeto con los demás, con las normas y no abarrotemos las terrazas de los bares, botellones en los parques, aglomeraciones en las colas del mercado…
Seamos la voz que grite "PENSEMOS EN NUESTROS NIÑOS" y podamos darles pequeñas libertades y satisfacciones que los adultos comenzamos a disfrutar.
Yorumlar